17 ago 2012

Visita al proyecto de abastecimiento y saneamiento en El Terrero, San Fco. de Coray

El jueves 9 de Agosto, casi recién llegados a San Francisco de Coray, nuestro hogar en la primera etapa PCR en Honduras, ya se tiene planeada la primera visita a campo al proyecto constructivo que queda para cerrar el Programa del Plan de Gestión Integral del Recurso Hídrico (PGIRH) en el Municipio: comunidad de El Terrero.

Este proyecto es el último de los dos llevados a cabo en la última fase del PGIRH, dentro del Programa llevado a cabo gracias a la financiación de AECID y el trabajo conjunto de ESF Galicia con la contraparte Save the Children (StC) además de, como no, los beneficiarios de la comunidad. Resolverá las necesidades de agua y saneamiento en 56 familias y la escuela. Ocho familias de la comunidad se quedarán fuera de la cobertura de este proyecto por quedar situadas a demasiada altura en unos casos, o por la negativa a participar en los trabajos y capacitaciones.

De camino a la comunidad, impresionaba la altura a la que esta está situada, una comunidad muy remota, y las dificultades para llegar a ella por los caminos disponibles. Es difícil creer que una perforadora haya llegado hasta allí; pero así fue. Sin embargo, para ello fue vital la colaboración de los beneficiarios a la hora de empedrar el camino para mejorarlo y así hacerlo más viable para el paso de la enorme máquina.

Camino empedrado por la comunidad para mejorar la accesibilidad

Una vez llegados a El Terrero, pudimos observar uno de los lugares donde se apilaban los materiales de construcción. Estos materiales son transportados por un camión hasta un lugar más o menos accesible para después ser transportados con ayuda de mulas o, incluso, cargados por los trabajadores hasta el lugar de la obra.
Llegada. Una de las zonas de almacenamiento de materiales junto a casa de beneficiaria


Beneficiarios llenando sacos de arena para luego ser transportados hasta obra

Aquí comenzaba la visita en sí. Primeramente, le echamos un vistazo a la perforación ya acabada. Norman, técnico de StC, nos comenta que hubo muchas dificultades. No se pudo colocar la perforadora en el lugar que en un principio había señalado como adecuado el hidrogeólogo. Por lo tanto, la perforación se hizo a unas decenas de metros de allí. El emplazamiento donde acabó perforando se decidió, por falta de datos de carácter hidrológico en la zona, con ayuda de la técnica de la radiestesia con péndulo. Como información técnica cabe destacar que tiene una profundidad de 155 metros. El agua será bombeada hasta el tanque situado a mayor altura con la ayuda de una bomba que funcionará con energía solar, gracias a una placa colocada en el exterior.

Beneficiarios apoyando en la perforación

A continuación, comenzaba la caminata, agradable pero sufrida (debido al calor y al pronunciado relieve), por buena parte de la comunidad. Nuestra primera parada fue el tanque, en donde estaban trabajando el albañil y los beneficiarios en el afinado de las paredes interiores. El siguiente paso sería la construcción de la losa y estaría listo para funcionar. Este tanque tiene un diámetro de 4.3 m., una altura de 2.7m. y una capacidad de unos 10,000 galones (37,854 litros). Esta capacidad fue calculada teniendo en cuenta el futuro crecimiento poblacional de la comunidad.

Perspectiva del tanque
De los tres tubos que se observan en la fotografía anterior, el tubo largo es el tubo de limpieza, los dos de arriba son uno para distribución y otro tubo de rebose.

Beneficiarios trabajando en la mezcla de material para el tanque

Después, nos adentramos en la naturaleza abrupta del lugar para visitar casa por casa a muchos de los beneficiarios. Tuvimos mucha suerte ya que coincidimos con letrinas y pilas ya acabadas y otras aún en proceso constructivo.

Beneficiaria junto a PCRs mostrando su nueva pila aún por rematar

Camino entre casa y casa durante la visita

Tras visitar alrededor de diez casas. Una familia muy maja nos acogió en su casa y nos invitó a comer. Fue un rato muy agradable, donde pudimos descansar, disfrutar de la sombra y de una conversación muy interesante con los trabajadores y uno de los albañiles llamado Tigo. Además, pudimos comprobar la organización interna a la hora de dividirse un grupos de trabajo a lo largo y ancho de la comunidad, formados por un líder comunitario (perteneciente a la Junta de Agua) y once trabajadores.

Descansando y conversando un poco tras la comida

Organización interna en grupos de trabajo

La impresión general que nos llevamos fue muy positiva. Pudimos comprobar de primera mano lo inmensamente emocionadas, agradecidas y comprometidas con el proyecto que están las gentes beneficiarias del mismo; todo esto a pesar de la pérdida de la primera cosecha debido a la falta de lluvias, lo cual agrava bastante la subsistencia en la zona durante los próximos meses. De sus propias palabras pudimos oír como les cambiará la vida el tener dotación de agua directamente en sus casas apartir de ahora. Anteriormente, esta gente tenía que ir en busca de agua sin tratar a fuentes situadas a varios kilómetros de sus casas. Sin embargo, y a pesar de todos los agradecimientos recibidos, les hemos hecho saber que los agradecidos somos nosotros, ya que el protagonismo y éxito es de ellos, sin su compromiso y ganas para trabajar, organizarse como comunidad y aprender, nada sería posible.

6 comentarios:

Daniel dijo...

Cualquier comentario o pregunta acerca de algo que no entendiesen o que quieran más información será muy bienvenido!

Anahí dijo...

Muy buen proyecto, ánimo!!

sergio dijo...

Me ha encantado la entrada!! Seguid aprendiendo y contándonos lo que véis!

Pepe dijo...

Muy chula! Seguid contando!!!

Victoriano Fabeiro Balboa dijo...

Opino o mesmo, noraboa pola entrada!!

Daniel dijo...

Muchas gracias a todos!! :)